El cáncer de piel es una enfermedad que genera mucho miedo e incertidumbre.

La piel tiene memoria y en ocasiones no somos conscientes de que los actos que cometemos en nuestra infancia pueden pasarnos factura a lo largo de los años. Con la llegada del verano y el buen tiempo exponemos nuestra piel al sol, muchas veces sin protección solar, sin ser conscientes de que la luz ultravioleta genera quemaduras y daña nuestra piel. 

Existen varios tipos de cáncer de piel. Los tres tipos de cáncer de piel más comunes son el carcinoma basocelular, el carcinoma espinocelular y el melanoma, que es el más peligroso y el que causa más muertes. En este artículo hablaremos del melanoma y sus principales características. Si quieres saber más sobre los tipos de melanoma y cuáles son los factores de riesgo más comunes, ¡sigue leyendo!

 

¿Qué es un melanoma?

El melanoma es el cáncer de piel más agresivo, porque tiene mucha capacidad de invasión y de propagación a otros órganos y tejidos. Es un cáncer que afecta a los melanocitos, que son las células responsables de la producción de melanina. La melanina es esa sustancia natural encargada de dar color a la piel y de protegerla frente a la luz ultravioleta.

Es una enfermedad que puede sufrir cualquier persona, pero es importante resaltar que es el cáncer de piel más común entre los jóvenes adultos, aunque normalmente la edad media de diagnóstico es alrededor de los 60 años.

El melanoma suele localizarse en la zona del pecho y de la espalda en los hombres. En las mujeres, aparece en las piernas, pero también es muy común en otras zonas como los ojos, la boca o los genitales. La forma principal que tiene de manifestarse es un lunar muy pigmentado, con un color café o negro. Por el contrario, también existen melanomas malignos con un color blanquecino o rosado.

Crece inicialmente en forma horizontal, sin profundizar en la piel, pero pasados unos años es cuando empieza a crecer en vertical. Es en esta segunda fase, cuando crece en vertical, cuando puede extenderse a otras zonas del cuerpo y producir metástasis. Sin embargo, si lo diagnosticamos a tiempo y lo extirpamos con cirugía, es fácil curarlo. 

Los dermatólogos aseguran que en los últimos años el cáncer de melanoma se ha duplicado. La estimación del número de nuevos casos de melanoma de piel de la Red Española de Registros de Cáncer para 2022 es de 7.474, siendo mayor el número en hombres que en mujeres.

 

Tipos de melanoma

Dentro del cáncer de piel tipo melanoma existen varias tipologías que pueden clasificarse en función de su localización, su color, su forma u extensión.

Melanoma de extensión superficial

Es el melanoma más común, representa el 70% de los casos y se origina normalmente en personas con pieles claras. Aparece a los 40 o 50 años en individuos que han tenido una exposición solar intermitente. La forma que tiene de manifestarse es una mancha de color no homogéneo, encima de un lunar ya existente o encima de la propia piel sana.

Melanoma nodular

Este melanoma es el segundo más común en personas con pieles claras. Aparece como un bulto o una elevación en la piel y suele extenderse por el tronco. Tiene la característica de tener un color muy oscuro y avanza muy rápidamente. En cuestión de semanas o meses, puede haber crecido muy rápido. Incluso, en algunas ocasiones, puede ser que sangre.

Melanoma lentigo maligno

Este melanoma se da en personas de edad avanzada, más o menos sobre los 70 u 80 años, que han estado expuestas al sol de forma crónica. Se cree que está ligado a la memoria de la piel, que se ha visto afectada por lesiones y quemaduras producidas por largas horas de exposición solar. La forma de manifestarse es una mancha que se va pigmentando a lo largo de los años. Su crecimiento es lento y en raras ocasiones se extiende a otros órganos.

Melanoma lentigo acral

Es el más común en las razas de piel oscura. Generalmente, se extiende en las palmas de las manos o en la planta de los pies. Una de las características más peculiares de este tipo de melanomas es que en la uña suele brotar una línea muy peculiar pigmentada. Este melanoma no está relacionado con la exposición solar.

 

Causas y factores de riesgo de un melanoma

Actualmente no se conocen con exactitud cuáles son las causas principales de la aparición del melanoma, pero sí se han identificado algunos factores de riesgo. Hay personas que tienen más probabilidad que otras de contraer cáncer de piel, todo dependerá principalmente del tipo de piel que tengamos.

Como hemos explicado anteriormente, el melanoma se origina por mutaciones en los melanocitos. Una de las principales causas para que se produzca esta mutación es la exposición a la luz ultravioleta, pero también existen otros factores de riesgo que hacen probable su desarrollo en determinados grupos de personas.

      

Exposición a la luz ultravioleta

La exposición solar desempeña un papel fundamental en el desarrollo del cáncer de piel. El melanoma parece estar asociado más directamente con la exposición a la radiación ultravioleta B (UVB) del sol, pero la información más reciente indica que la radiación ultravioleta A (UVA) también puede influir en su desarrollo. Es muy importante utilizar una buena protección solar y evitar largas exposiciones al sol.

Antecedentes por quemaduras solares

Es importante entender que parte del daño que recibe nuestro cuerpo en una quemadura solar se queda con nosotros para siempre. La piel “recuerda” mediante las mutaciones los momentos en los que ha sufrido. Por eso, es tan importante tomar medidas y protegernos de las radiaciones solares.

Personas con piel clara, ojos claros, pelo rubio o rojizo

El riesgo de padecer melanoma es mucho mayor en personas de raza blanca. Las personas con ojos claros, pelo rubio y pecas tienen mayor riesgo. 

Lunares

La mayoría de los lunares nunca causarán ningún trastorno, pero es aconsejable que se evalúen y se tenga un control sobre ellos. Muchos dermatólogos recomiendan realizar autoexámenes en la piel cada mes.

Antecedentes personales y familiares

Otro factor de riesgo bastante lógico es si alguien de nuestra familia ha sufrido un melanoma. Por lo tanto, se recomienda que los familiares cercanos de una persona con melanoma se examinen la piel de forma habitual. También, si previamente has sufrido cáncer de piel, tienes mayor riesgo de volver a desarrollar la patología.

 

Síntomas de un melanoma

Para aumentar las posibilidades de detectar el cáncer de piel temprano, los dermatólogos recomiendan seguir unos criterios para autoexaminar la piel. Estos criterios se denominan ABCDE.

Asimetría. Si un lunar es simétrico, no hay problema, pero en el momento en el que un lado de ese lunar deja de tener simetría podría ser un melanoma.

Borde. Los bordes tienen que ser regulares. Cuidado si tienes un lunar con bordes irregulares, mal definidos u ondulados.

Color. El melanoma se suele manifestar con un color no homogéneo. Diferentes tonos de marrón o negro. En algunos casos pueden ser rojos o azules.

Diámetro. Los melanomas nunca suelen ser inferiores a 6mm.

Evolución. Tenemos que hacer una exploración de las manchas y de los lunares de nuestro cuerpo para ver su evolución. Otros cambios que pueden indicar la aparición de melanoma es si hay dolor, sangrado o picazón.

 

Tratamiento de un melanoma y diagnóstico

Es muy importante la detección precoz. Cuando se detecta un melanoma en los estadios primeros la tasa de curación es muy alta. Sin embargo, en estadios más altos la tasa de curación es menor. Cuando tenemos un melanoma lo primero que se hace es extirparlo por completo con cirugía. A continuación, se estudiará y analizará. Si es necesario, se tendrán que hacer pruebas complementarias. Si el melanoma que se ha extirpado es de un estadio elevado, el paciente deberá recibir tratamiento de quimioterapia, radioterapia o inmunoterapia.

Ante la mayor sospecha lo más aconsejable es acudir inmediatamente al médico. Lo más importante es la prevención. Es primordial que nos exploremos el cuerpo y sigamos una evolución de los lunares que tenemos para evitar el cáncer de piel.

Si tienes interés en recibir formación especializada en salud, te recomendamos navegar por nuestra web para descubrir todo lo que Formación Alcalá puede hacer por ti (como nuestros másters de enfermería online).